COMUNICAR PARA INTERNACIONALIZAR
COMUNICAR PARA INTERNACIONALIZAR
«Internacionalizar» es un verbo que hemos aprendido a conjugar de carrerilla desde que estalló la crisis en España. Sin embargo, hacer la maleta y marcharse a la aventura sin planificar nuestro negocio puede abocarlo al fracaso.
La internacionalización de nuestra empresa -o, mejor dicho, la posibilidad de internacionalizar nuestro negocio- comienza en casa. Es la principal conclusión del encuentro que mantuvimos el pasado viernes los participantes en la primera edición de «Plató Exterior», una novedosa iniciativa que presentaré el próximo 27 de junio para explicar a las PYMES qué deben tener en cuenta para acceder al mercado de los Estados Unidos de América.
Antes de hacer la maleta, embarcarnos rumbo a la aventura y aterrizar en un país que desconocemos, debemos estudiar su idiosincrasia e invertir para conocer con exactitud a qué segmento de la población de qué parte del país podemos ofrecer nuestros productos y servicios. Tenemos que decidir si afrontaremos este proyecto en solitario o si iremos de la mano de un socio local. En ese caso, necesitamos conocer qué socios son los más interesantes, cuáles los más fiables y cuáles los que nunca deberían acompañarnos. Y debemos definir una estrategia de marketing -con la mirada fija en el marketing on-line– que acompañe nuestra implantación en el nuevo mercado.
La financiación, un factor imprescindible
Además, debemos tener muy claro con qué financiación contamos en España y en el país al que deseamos acceder, los impuestos que tenemos que afrontar, la documentación legal que necesitamos… Y, ante todo, si contamos con respaldo económico para poder hacerlo. Porque, como me comentaban en esa reunión, incluso empresas consolidadas en España no han podido internacionalizarse por las exigencias financieras de su proyecto o porque no contaban con socios que resultaran fiables para los bancos.
Internacionalizar nuestra empresa resulta un proceso fascinante, encaminado al enriquecimiento -no sólo económico- de nuestro negocio. Afrontarlo como una aventura, como una forma de testar nuestra fortaleza empresarial o como el último cartucho para salvar la compañía puede provocarnos algo más que un par de dolores de cabeza.
Por eso, es imprescindible comunicar cómo se desarrollan los procesos de internacionalización, acercar mercados y ofrecer las claves para acceder a ellos. Y, precisamente por todo ello, en SUKUN estamos encantados de formar parte de esta iniciativa de EMPRESA EXTERIOR, que muestra el proceso de internacionalización como una labor de artesanía que, bien desarrollada, puede marcar el camino a un éxito desconocido.